La parcela objeto de este proyecto se sitúa en la localidad de Liérganes, en un paraje natural, pero a escasos metros del centro del municipio y lindando con el balneario, edificio histórico del siglo XIX. 

La localidad cuenta con un patrimonio cultural importante y un casco histórico considerado conjunto histórico artístico. 

Con estos condicionantes se planteó como objetivo principal de la propuesta diseñar unas edificaciones que se integraran al máximo tanto con el entorno como con las edificaciones tradicionales del municipio, por lo que se estudió cuidadosamente toda la arquitectura local. 

Fruto de este análisis surgen las 14 viviendas de este proyecto, algunas aisladas y otras pareadas, diseñadas con amplias galerías a modo de balcones, donde la madera y la piedra son protagonistas, tanto en la fachada como en los amplios aleros. 

Por el interior el planteamiento es completamente distinto, proyectándose un espacio continuo que une la planta baja y la primera a través de la doble altura inclinada del salón. La amplia escalera exenta de caracol se erige como elemento protagonista del espacio. 

La puerta de acceso se sitúa bajo la galería de la planta primera, de forma que sirva de protección frente a la lluvia, creando un pequeño porche. 

El distribuidor de entrada comunica con la cocina, un dormitorio y el salón. Este se organiza en dos ambientes, con una chimenea exenta en la zona de estar que crea dos espacios diferenciados. 

A la planta primera se accede mediante la escalera de caracol exenta que comunica con un espacio de estar-distribuidor abierto a la doble altura del salón y desde el que se accede a los 3 dormitorios, que a su vez se encuentran unidos de nuevo por la terraza-galería común situada en la fachada principal.